28
Y sucederá que después de esto, derramaré mi Espíritu sobre toda carne; y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán, vuestros ancianos soñarán sueños, vuestros jóvenes verán visiones.
29
Y aun sobre los siervos y las siervas derramaré mi Espíritu en esos días.
30
Y haré prodigios en el cielo y en la tierra: sangre, fuego y columnas de humo.