8
Siervos se enseñorearon de nosotros; no hubo quien nos librara de su mano
9
Con peligro de nuestras vidas traíamos nuestro pan delante de la espada del desierto
10
Nuestra piel se ennegreció como un horno a causa del ardor del hambre
11
Violaron a las mujeres en Sion, a las vírgenes en las ciudades de Judá
12
A los príncipes colgaron con su mano; no respetaron el rostro de los ancianos
13
Llevaron los jóvenes a moler, y los niños desfallecieron en la leña
14
Los ancianos cesaron de la puerta, los jóvenes de sus canciones
15
Cesó el gozo de nuestro corazón; nuestro corro se tornó en luto
16
Cayó la corona de nuestra cabeza. ¡Ay ahora de nosotros! Porque pecamos
17
Por esto fue entristecido nuestro corazón, por esto se entenebrecieron nuestro ojos
18
Por el Monte de Sion que está asolado; zorras andan en él