25
se enternecerá su carne más que de niño, y volverá a los días de su juventud
26
Orará a Dios, y le amará, y verá su faz con gritos de alegría; y él dará al hombre el pago de su justicia
27
El mira sobre los hombres; y el que dijere: Pequé, y pervertí lo recto, y no me ha aprovechado
28
Dios rescatará su alma, que no pase a la huesa, y su vida se verá en luz
29
He aquí, todas estas cosas hace Dios dos y tres veces con el hombre
30
para apartar su alma de la huesa, e iluminarlo con la luz de los vivientes
31
Escucha, Job, y óyeme; calla, y yo hablaré
32
Y si tuvieres palabras, respóndeme; habla, porque yo te quiero justificar
33
Y si no, óyeme tú a mí; calla, y te enseñaré sabiduría