2
Diré a Dios: No me condenes; hazme entender por qué pleiteas conmigo
3
¿Te parece bien que oprimas, y que deseches la obra de tus manos, y que resplandezcas sobre el consejo de los impíos
4
¿Tienes tú ojos de carne? ¿Ves tú como ve el hombre
5
¿Son tus días como los días del hombre, o tus años como los tiempos humanos
6
para que inquieras mi iniquidad, y busques mi pecado
7
sobre saber tú que no soy impío, y que no hay quien de tu mano me libre
8
Tus manos me formaron y me compusieron todo en contorno, ¿y así me deshaces
9
Acuérdate ahora que como a lodo me diste forma; ¿y en polvo me has de volver
10
¿No me fundiste como leche, y como un queso me cuajaste
11
Me vestiste de piel y carne, y me cubriste de huesos y nervios
12
Vida y misericordia me concediste, y tu visitación guardó mi espíritu