10
Mas el SEÑOR Dios es la Verdad; él mismo es Dios Vivo y Rey Eterno; de su ira tiembla la tierra, y los gentiles no pueden sufrir su furor
11
Les diréis así: dioses que no hicieron los cielos ni la tierra, perezcan de la tierra y de debajo de estos cielos
12
El que hace la tierra con su potencia, el que pone en orden el mundo con su saber, y extiende los cielos con su inteligencia
13
a su voz se da muchedumbre de aguas en el cielo, y hace subir las nubes de lo postrero de la tierra; hace los relámpagos con la lluvia, y hace salir el viento de sus escondederos
14
Todo hombre es carnal en su ciencia. Avergüéncese de su vaciadizo todo fundidor, porque mentira es su obra de fundición, ni hay espíritu en ellos
15
vanidad son, obra de escarnios; en el tiempo de su visitación perecerán
16
No es como ellos la suerte de Jacob; porque él es el Hacedor de todo, e Israel es la vara de su herencia; el SEÑOR de los ejércitos es su Nombre
17
Recoge de las tierras tus mercaderías, la que moras en lugar fuerte
18
Porque así dijo el SEÑOR: He aquí que esta vez arrojaré con honda los moradores de la tierra, y he de afligirlos, para que lo hallen
19
¡Ay de mí, por mi quebrantamiento! Mi llaga es muy dolorosa. Pero yo dije: Ciertamente enfermedad mía es ésta, y debo sufrirla
20
Mi tienda es destruida, y todas mis cuerdas están rotas; mis hijos fueron sacados de mí, y perecieron; no hay ya más quien extienda mi tienda, ni quien levante mis cortinas