34
Mas un varón disparando su arco en su perfección, hirió al rey de Israel por entre las junturas de la cota; por lo que dijo él a su carretero: Da la vuelta, y sácame del campo, que estoy herido
35
La batalla había arreciado aquel día, y el rey estuvo en su carro delante de los sirios, y a la tarde murió; y la sangre de la herida corría al fondo del carro
36
Y a la puesta del sol salió un pregón por el campamento, diciendo: ¡Cada uno a su ciudad, y cada cual a su tierra
37
Murió, pues, el rey, y fue traído a Samaria; y sepultaron al rey en Samaria
38
Y lavaron el carro en el estanque de Samaria; lavaron también sus armas; {Heb. fornicaciones} y los perros lamieron su sangre, conforme a la palabra del SEÑOR que había hablado
39
Los demás hechos de Acab, y todas las cosas que hizo, y la casa de marfil que edificó, y todas las ciudades que edificó, ¿no está todo escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Israel
40
Y durmió Acab con sus padres, y reinó en su lugar Ocozías su hijo
41
Y Josafat hijo de Asa comenzó a reinar sobre Judá en el cuarto año de Acab rey de Israel
42
Y era Josafat de treinta y cinco años cuando comenzó a reinar, y reinó veinticinco años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Azuba hija de Silhi
43
Y anduvo en todo el camino de Asa su padre, sin declinar de él, haciendo lo recto ante los ojos del SEÑOR. Con todo eso, los lugares altos no fueron quitados; porque aún el pueblo sacrificaba, y quemaba incienso en los lugares altos
44
Y Josafat hizo paz con el rey de Israel