11
¡Ay del impío! Le irá mal, porque lo que él merece se le hará.
12
¡Oh pueblo mío! Sus opresores son muchachos, y mujeres lo dominan. Pueblo mío, los que te guían te hacen desviar y confunden el curso de tus sendas.
13
El SEÑOR se levanta para contender, está en pie para juzgar a los pueblos.
14
El SEÑOR entra en juicio con los ancianos de su pueblo y con sus príncipes: Pues vosotros habéis devorado la viña, el despojo del pobre está en vuestras casas.
15
¿Qué pensáis al aplastar a mi pueblo y al moler la cara de los pobres? declara el Señor, DIOS de los ejércitos.
16
Además, dijo el SEÑOR: Puesto que las hijas de Sion son orgullosas, andan con el cuello erguido y los ojos seductores, y caminan con paso menudo haciendo tintinear las ajorcas en sus pies,
17
el Señor herirá con tiña el cráneo de las hijas de Sion, y el SEÑOR desnudará su frente.
18
Aquel día el Señor les quitará el adorno de las ajorcas, los tocados y las lunetas,
19
los pendientes, los brazaletes y los velos,
20
las redecillas, las cadenillas de los pies, las cintas, las cajitas de perfume y los amuletos,
21
los anillos y aretes de nariz,