16
Los hijos de Gad: Zifión, Hagui, Suni, Ezbón, Eri, Arodi y Areli.
17
Los hijos de Aser: Imna, Isúa, Isúi, Bería y Sera, hermana de ellos. Y los hijos de Bería: Heber y Malquiel.
18
Estos son los hijos de Zilpa, a quien Labán dio a su hija Lea, y que le dio a luz a Jacob estas dieciséis personas.
19
Los hijos de Raquel, mujer de Jacob: José y Benjamín.
20
Y a José, en la tierra de Egipto le nacieron Manasés y Efraín, los cuales le dio a luz Asenat, hija de Potifera, sacerdote de On.
21
Los hijos de Benjamín: Bela, Bequer, Asbel, Gera, Naamán, Ehi, Ros, Mupim, Hupim y Ard.
22
Estos son los hijos de Raquel, que le nacieron a Jacob; catorce personas en total.
23
Los hijos de Dan: Husim.
24
Los hijos de Neftalí: Jahzeel, Guni, Jezer y Silem.
25
Estos son los hijos de Bilha, a quien Labán dio a su hija Raquel, y que ella le dio a luz a Jacob; en total siete personas.
26
Todas las personas de la familia de Jacob, que vinieron a Egipto, descendientes directos suyos, no incluyendo las mujeres de los hijos de Jacob, eran en total sesenta y seis personas.
27
Y los hijos de José, que le nacieron en Egipto, eran dos: todas las personas de la casa de Jacob que vinieron a Egipto, eran setenta.
28
Y Jacob envió a Judá delante de sí a José, para indicar delante de él el camino a Gosén; y llegaron a la tierra de Gosén.
29
Y José unció su carro y subió a Gosén para ir al encuentro de su padre Israel; y apenas lo vio, se echó sobre su cuello y lloró largamente sobre su cuello.
30
Entonces Israel dijo a José: Ahora ya puedo morir, después que he visto tu rostro y sé que todavía vives.
31
Y José dijo a sus hermanos y a la familia de su padre: Subiré y lo haré saber a Faraón, y le diré: "Mis hermanos y la familia de mi padre, que estaban en la tierra de Canaán, han venido a mí;
32
y los hombres son pastores de ovejas, pues son hombres de ganado; y han traído sus ovejas y sus vacas, y todo lo que tienen."
33
Y sucederá que cuando Faraón os llame y os diga: "¿Cuál es vuestra ocupación?",
34
vosotros responderéis: "Tus siervos han sido hombres de ganado desde su juventud hasta ahora, tanto nosotros como nuestros padres", a fin de que habitéis en la tierra de Gosén; porque para los egipcios todo pastor de ovejas es una abominación.