13
Y Caín dijo al SEÑOR: Mi castigo es demasiado grande para soportarlo.
14
He aquí, me has arrojado hoy de la faz de la tierra, y de tu presencia me esconderé, y seré vagabundo y errante en la tierra; y sucederá que cualquiera que me halle me matará.
15
Entonces el SEÑOR le dijo: No será así; pues cualquiera que mate a Caín, siete veces sufrirá venganza. Y puso el SEÑOR una señal sobre Caín, para que cualquiera que lo hallase no lo matara.
16
Y salió Caín de la presencia del SEÑOR, y se estableció en la tierra de Nod, al oriente del Edén.
17
Y conoció Caín a su mujer, y ella concibió y dio a luz a Enoc; y edificó una ciudad y la llamó Enoc, como el nombre de su hijo.
18
A Enoc le nació Irad, Irad engendró a Mehujael, Mehujael engendró a Metusael, y Metusael engendró a Lamec.
19
Lamec tomó para sí dos mujeres; el nombre de una era Ada, y el nombre de la otra, Zila.
20
Y Ada dio a luz a Jabal, el cual fue padre de los que habitan en tiendas y tienen ganado.
21
Su hermano se llamaba Jubal, el cual fue padre de todos los que tocan la lira y la flauta.
22
Y Zila a su vez dio a luz a Tubal-caín, forjador de todo utensilio de bronce y de hierro; y la hermana de Tubal-caín era Naama.
23
Y Lamec dijo a sus mujeres: Ada y Zila, oíd mi voz; mujeres de Lamec, prestad oído a mis palabras, pues he dado muerte a un hombre por haberme herido, y a un muchacho por haberme pegado.