9
por tanto, pastores, oíd la palabra del SEÑOR:
10
"Así dice el Señor DIOS: 'He aquí, yo estoy contra los pastores y demandaré mi rebaño de su mano y los haré dejar de apacentar el rebaño. Así los pastores ya no se apacentarán más a sí mismos, sino que yo libraré mis ovejas de su boca, y no serán más alimento para ellos.'"
11
Porque así dice el Señor DIOS: He aquí, yo mismo buscaré mis ovejas y velaré por ellas.
12
Como un pastor vela por su rebaño el día que está en medio de sus ovejas dispersas, así yo velaré por mis ovejas y las libraré de todos los lugares adonde fueron dispersadas un día nublado y sombrío.
13
Las sacaré de los pueblos y las juntaré de las tierras; las traeré a su propia tierra, y las apacentaré en los montes de Israel, por las barrancas y por todos los lugares habitados del país.
14
Las apacentaré en buenos pastos, y en los altos montes de Israel estará su apacentadero. Allí reposarán en apacentadero bueno, y apacentarán en ricos pastos sobre los montes de Israel.
15
Yo apacentaré mis ovejas y las llevaré a reposardeclara el Señor DIOS.
16
Buscaré la perdida, haré volver la descarriada, vendaré la perniquebrada y fortaleceré la enferma; pero destruiré la engordada y la fuerte. Las apacentaré con justicia.
17
Mas en cuanto a vosotras, ovejas mías, así dice el Señor DIOS: "He aquí, yo juzgaré entre oveja y oveja, entre carneros y machos cabríos.
18
"¿Os parece poco pacer en los buenos pastos, para que holléis con vuestros pies el resto de vuestros pastos; o que bebáis de las aguas claras, para que enturbiéis el resto con vuestros pies?
19
"Y en cuanto a mis ovejas, tienen que comer lo que habéis hollado con vuestros pies, y tienen que beber lo que con vuestros pies habéis enturbiado."
20
Por tanto, así les dice el Señor DIOS: He aquí, yo mismo juzgaré entre la oveja engordada y la oveja flaca.
21
Por cuanto vosotros habéis empujado con el flanco y con el hombro, y habéis embestido con vuestros cuernos a todas las débiles hasta dispersarlas fuera,
22
libraré mis ovejas y ya no serán presa; juzgaré entre oveja y oveja.
23
Entonces pondré sobre ellas un solo pastor que las apacentará, mi siervo David; él las apacentará y será su pastor.
24
Y yo, el SEÑOR, seré su Dios, y mi siervo David será príncipe en medio de ellas. Yo, el SEÑOR, he hablado.
25
Haré un pacto de paz con ellos y eliminaré de la tierra las bestias feroces, para que habiten seguros en el desierto y duerman en los bosques.
26
Y haré de ellos y de los alrededores de mi collado una bendición. Haré descender lluvias a su tiempo; serán lluvias de bendición.
27
El árbol del campo dará su fruto y la tierra dará sus productos, y ellos estarán seguros en su tierra. Y sabrán que yo soy el SEÑOR cuando yo quiebre las varas de su yugo y los libre de la mano de los que los han esclavizado.
28
No serán más presa de las naciones, y las fieras de la tierra no los devorarán; sino que habitarán seguros y nadie los atemorizará.
29
Y estableceré para ellos un plantío de renombre, y no serán más víctimas del hambre en la tierra, ni sufrirán más los insultos de las naciones.