3
tampoco serás parcial al pobre en su pleito.
4
Si encuentras extraviado el buey de tu enemigo o su asno, ciertamente se lo devolverás
5
Si ves caído debajo de su carga el asno de uno que te aborrece, no se lo dejarás a él solo, ciertamente lo ayudarás a levantarlo.
6
No pervertirás el derecho de tu hermano menesteroso en su pleito.
7
Aléjate de acusación falsa, y no mates al inocente ni al justo, porque yo no absolveré al culpable.
8
Y no aceptarás soborno, porque el soborno ciega aun al de vista clara y pervierte las palabras del justo.
9
No oprimirás al extranjero, porque vosotros conocéis los sentimientos del extranjero, ya que vosotros también fuisteis extranjeros en la tierra de Egipto.
10
Seis años sembrarás tu tierra y recogerás su producto;
11
pero el séptimo año la dejarás descansar, sin cultivar, para que coman los pobres de tu pueblo, y de lo que ellos dejen, coman las bestias del campo. Lo mismo harás con tu viña y con tu olivar.
12
Seis días trabajarás, pero el séptimo día dejarás de trabajar, para que descansen tu buey y tu asno, y para que el hijo de tu sierva, así como el extranjero renueven sus fuerzas.
13
Y en cuanto a todo lo que os he dicho, estad alerta; no mencionéis ni se oiga en vuestros labios el nombre de otros dioses.
14
Tres veces al año me celebraréis fiesta
15
Guardarás la fiesta de los panes sin levadura. Siete días comerás pan sin levadura, como yo te mandé, en el tiempo señalado del mes de Abib, pues en él saliste de Egipto. Y nadie se presentará ante mí con las manos vacías.
16
También guardarás la fiesta de la siega de los primeros frutos de tus labores, de lo que siembres en el campo; y la fiesta de la cosecha al fin del año cuando recojas del campo el fruto de tu trabajo.
17
Tres veces al año se presentarán todos tus varones delante del Señor DIOS.
18
No ofrecerás la sangre de mi sacrificio con pan leudado; ni la grosura de mi fiesta quedará hasta la mañana.
19
Traerás lo mejor de las primicias de tu tierra a la casa del SEÑOR tu Dios. No cocerás el cabrito en la leche de su madre
20
He aquí, yo enviaré un ángel delante de ti, para que te guarde en el camino y te traiga al lugar que yo he preparado.
21
Sé prudente delante de él y obedece su voz; no seas rebelde contra él, pues no perdonará vuestra rebelión, porque en él está mi nombre
22
Pero si en verdad obedeces su voz y haces todo lo que yo digo, entonces seré enemigo de tus enemigos y adversario de tus adversarios.
23
Pues mi ángel irá delante de ti y te llevará a la tierra del amorreo, del heteo, del ferezeo, del cananeo, del heveo y del jebuseo; y los destruiré por completo.